Artistas británicos representan solo el 7.9% del consumo en streaming global
En 2023, las exportaciones de música grabada del Reino Unido alcanzaron una cifra histórica de 775 millones de libras esterlinas, reflejando un crecimiento interanual del 7.6%. Sin embargo, este aumento fue insuficiente para frenar la caída de la cuota del Reino Unido en el consumo global de música, una señal de que la industria musical británica enfrenta crecientes desafíos en el contexto internacional. La desaceleración en las exportaciones musicales británicas, en comparación con el crecimiento global del 10.2%, subraya la presión que el mercado internacional ejerce sobre los artistas británicos.
La pérdida de protagonismo de la música en inglés
Un cambio notable es la disminución de la presencia de artistas del Reino Unido en el streaming global. En 2015, artistas británicos representaban el 17% de las reproducciones mundiales; hoy esta cifra se sitúa alrededor del 10%. Incluso en los mercados anglófonos, el consumo de música en inglés ha disminuido, mientras que la música latina, el K-pop y géneros africanos como el Afrobeats han ganado terreno. Este cambio se debe, en parte, a la creciente popularidad de la música en idiomas locales en regiones como América Latina y Europa, donde los consumidores han mostrado una fuerte preferencia por la música que refleja su identidad cultural.
Datos del informe de mitad de año de Luminate 2024 revelaron que los artistas del Reino Unido representaron el 7.9% del streaming mundial en la primera mitad de ese año, una baja frente al 8.49% del año anterior. En contraste, artistas de países como México, Brasil y Francia experimentaron un aumento en su participación global en el streaming, lo que destaca un cambio en las preferencias del público hacia artistas que cantan en su propio idioma y reflejan sus raíces culturales.
Competencia y respaldo gubernamental
El Reino Unido ahora compite no solo contra potencias tradicionales como Estados Unidos y Canadá, sino también contra mercados emergentes y bien respaldados como Corea del Sur y los países latinoamericanos. En Corea del Sur, el gobierno ha desempeñado un papel clave en la internacionalización del K-pop, lo que ha permitido que sus artistas alcancen popularidad en mercados clave de todo el mundo. Esto ha servido como un recordatorio para la industria británica de que el apoyo estatal puede ser crucial para competir en la arena internacional.
A pesar de la caída de la cuota de mercado global, la música británica aún cuenta con varios puntos a su favor. El Music Export Growth Scheme (MEGS), gestionado por la British Phonographic Industry (BPI) y financiado en conjunto con el gobierno británico, ha sido un apoyo importante. En 2023, de los 500 artistas británicos que superaron los 100 millones de reproducciones, dos docenas fueron beneficiarios de este esquema. El gobierno británico anunció recientemente un aumento de 3.2 millones de libras para este programa en los próximos dos años, destacando su compromiso con la industria musical del país.
Estados Unidos, el principal mercado de exportación
El mercado estadounidense sigue siendo el destino más importante para la música británica, con un volumen de exportación que alcanzó los 320.9 millones de libras, representando un crecimiento interanual del 8.3%. Le siguen Alemania, con un aumento del 6.7%, y Francia, con un incremento del 2.4%. Sin embargo, la región de mayor crecimiento en 2023 fue India, con un aumento del 26.3%, lo que indica que los mercados emergentes están brindando nuevas oportunidades para la expansión de la música británica.
Desafíos y oportunidades futuras
La directora ejecutiva de la BPI, Dra. Jo Twist, OBE, subraya la necesidad de que la música británica reciba un mayor respaldo gubernamental para competir en el creciente entorno global. Twist menciona que, aunque el Reino Unido sigue siendo una «superpotencia musical», debe fortalecerse la inversión en talento local y proteger la creatividad humana, incluso ante los avances tecnológicos y la competencia internacional.
Para que la industria musical del Reino Unido alcance el objetivo de 1,000 millones de libras en exportaciones para 2030, será fundamental contar con un entorno político favorable que permita la inversión continua en talento y en expansión internacional. El auge de fenómenos musicales globales como el K-pop, la música latina y el Afrobeats plantea desafíos, pero también oportunidades para diversificar el alcance de los artistas británicos en mercados emergentes.
