Descubrir artistas en conciertos genera más ingresos a la industria

Uno de los temas centrales en el continuo debate sobre el futuro de la industria de la música es cómo el cambio de los hábito de consumo de la gente está afectando los ingresos de los artistas, específicamente la transición de este consumo de un formato de compra a un formato de acceso, representado por la migración de los usuarios hacia las plataformas de streaming, lo cual ha ocasionado una caída significativa en las ventas de CDs y descargas digitales.

Sin embargo, aunque el panorama para las ventas pareciera desolador, en el sector del directo estos cambios son bienvenidos, pues los fans que asisten a conciertos son mucho más rentables, por lejos, que aquellos que sólo compran el álbum y no asisten a los shows.

Un reciente estudio realizado por Eventbrite ha arrojado que los fans que compran tickets para un concierto tienden a gastar casi 20 veces más en música ($276) que los no compradores ($15), gastan 4 veces más en CDs y descargas, 10 veces más en merchandise, y son casi dos veces más propensos a pagar por suscripción de streaming.

Como una plataforma de ticketing que ha gestionado más de 165.000 eventos musicales a la fecha, Eventbrite ha experimentado de primera mano el rápido crecimiento de los conciertos y festivales. Por ello han decidido investigar sobre el vínculo entre el descubrimiento de música y la asistencia a conciertos.

En alizanza con la compañía de investigación MusicWatch, realizaron una encuesta a nivel nacional en los EEUU de personas entre las edades de 18 y 49 años que asistieron al menos a un concierto en el último año.

Los resultados fueron analizados agrupando a los fans según los principales canales que utilizan para descubrir música y se develó cómo el comportamiento luego del descubrimiento estimula la motivación a la compra de eventos en directo.

El streaming impulsa la asistencia a conciertos

Los servicios de streaming se han convertido en una importante fuente de descubrimiento de música: cuando se le preguntó cómo encontraron nuevos artistas y bandas en el año pasado, el 42% de los encuestados citó servicios de streaming de audio o vídeo como Pandora, Spotify y YouTube. Y con los nuevos servicios de streaming introducidos al mercado por jugadores clave como Apple y Jay Z (Tidal), está claro que hacia allí seguirá dirigiéndose la industria.

Existe la preocupación de que el descubrimiento por streaming simplemente conduce a más escuchas por streaming, especialmente con la caída de las ventas físicas y digitales. Pero afortunadamente para los artistas, el 51% de los fans que encuentran un nuevo artista o banda a través de streaming están comprando entradas para verlos actuar en directo.

Las redes sociales amplifican la venta de entradas

Los aficionados a la música no solo se apoyan en servicios de streaming para encontrar nuevos sonidos. Dos de tres de los encuestados indicaron que han descubierto nueva música en redes sociales, y 14% mencionó haber descubierto a nuevos artistas enteramente a través de Facebook, Twitter, Instagram, Snapchat y Tumblr. Luego de ver que sus amigos publican sobre sus artistas favoritos, los usuarios no sólo escuchan los tracks, sino que dan el salto hacia el offline comprando tickets para sus shows. El 57% de los compradores de tickets han descubierto artistas a través de redes sociales. 

Esto sucede en parte porque los amigos no dejan que sus amigos vayan solos a un concierto. La otra parte es gracias al fenómeno FOMO, (Fear of Missing Out), o el «miedo a quedarse fuera» lo cual también impulsa la venta de tickets y asistencia a conciertos. En Eventbrite, un solo share en Facebook impulsa un incremento de 4,48 dólares en ventas de entradas para los promotores del evento. Está claro que nada puede sustituir a la euforia de un show en vivo, sobre todo cuando se sabe todos tus amigos están allí.

El Live Streaming también estimula el FOMO

Resulta que el live streaming de conciertos también estimula el «miedo a quedarse fuera». Por supuesto que mucha gente disfruta ahora de conciertos desde la comodidad de sus casas, pero estos fans que están viendo desde la distancia no están sentados pasivamente, están interactuando online. Otro estudio reciente de Eventbrite basado en 20 millones de conversaciones sobre festivales de música arrojó que el 23% de esos posts provenían de gente que estaba participando de forma remota, totalizando más de 4 millones de actualizaciones de fans que no estaban presentes en el evento.

Luego de que Coachella transmitiera su festival por live streaming en 2011, las ventas de entradas se dispararon y esta no es una tendencia pasajera: 70% de participantes en live streaming dijeron que son más propensos a asistir a un evento luego de haber participado en la experiencia online.

Los conciertos crean a los fans más valiosos

Aún cuando la radio y la TV siguen siendo los canales de descubrimiento más importantes, el 8% que indicó haber descubierto un nuevo artista gracias a un concierto, evento o festival, son considerablemente más propensos (74%) a comprar una entrada para verles actuar de nuevo otra vez.

Según el estudio, los fans que conocen a nuevos artistas a través de conciertos son casi dos veces más propensos a comprar mercancía de artistas. Estimular el descubrimiento en eventos en directo tiene el potencial de construir una base más sólida de ingresos para los artistas.

El cambio del descubrimiento lineal hacia un enfoque combinado estimula el gasto

Mientras que las formas de descubrimiento lineal como la radio siguen muy en vigencia, el descubrimiento de música hoy es un proceso más integrado. Streaming, redes sociales y el directo están en ascenso y definitivamente son claves para estimular la tendencia a la subida en el consumo de música en vivo.

Estos canales integrados tienen el poder de acelerar el descubrimiento de artistas nuevos, creando un círculo viral que amplifica la cobertura y estimula las ventas de tickets. La experiencia de asistir a un show se vuelve más popular cada día, y así también más rentable.

No solamente es el directo la forma más participativa de experimentar la música, es la forma que construye los lazos más fuertes entre un artista y sus fans. Los fans invierten más, tanto emocionalmente como financieramente en los artistas a los que ven en vivo, añadiendo más valor a la industria y a los artistas que le dan vida.