La venta de música en España sube por tercer año consecutivo, esta vez un 1,7%
La industria discográfica española consiguió crecer en 2016 por tercer año consecutivo. Los españoles gastaron durante este año 163,7 millones de euros en música grabada, una cantidad que supera tímidamente los 161,1 millones registrados en la temporada anterior. La suma de este nuevo incremento del 1,67% en el último ejercicio, después de dos años de clara recuperación, confirma la tendencia de mejora en un sector que, debido a la piratería y las descargas ilegales, había sufrido una importante caída de su volumen de negocio años atrás, pero que gracias al mercado digital se fortalece y alumbra un futuro optimista.
Después de pérdidas ininterrumpidas en España desde 2001 (cuando se vendían 603 millones de euros en fonogramas), 2014 acreditó un excepcional repunte del mercado de la música grabada en 21 puntos porcentuales. Las cosas fueron aún mejores en 2015, con unas ventas que superaban el registro anterior en un 6,85%. Esta tendencia se consolida en 2016, con una moderada subida de 1,67% en comparación con los años anteriores pero que permite cerrar un trienio que acumula un crecimiento de casi un 30%. El consumo de música digital se reafirma de manera cada vez más nítida en España, lo que contribuye al incremento de la cifra global.
Todos los pronósticos apuntaban a que el mercado digital superaría en ventas al físico en 2016, puesto que 2015 había terminado con un reñido 51/49 (físico/digital). El trasvase del modelo de consumo resulta evidente en 2016 donde el 61,2% de ingresos ya provienen de la venta digital frente a un 38,8% para las tiendas de discos tradicionales.
Este panorama esperanzador en el universo online es el efecto de la consolidación indiscutible de la modalidad de streaming. A lo largo de 2016 se superó el millón de suscriptores de pago a los servicios de música que ofrecen streaming en España.
Los ingresos por suscripción aumentaron en un 37,4%, hasta los 62,2 millones de euros, mientras que el streaming gratuito y financiado por publicidad sube un 24,7% hasta los 25,3 millones. En concreto, el sector digital pasó de generar unos ingresos de 79,6 millones a 100,2 millones de euros, un estirón espectacular de casi un 26 por ciento.
El mercado físico resiste gracias al vinilo
Las cifras del mercado físico evidencian una suave transición de consumo hacia lo digital. Con todo, el ingreso generado por la venta de CD y vinilos supera la nada despreciable cantidad de 63,5 millones de euros en 2016. Durante el pasado ejercicio se vendieron en más de 8 millones y medio de discos, la mayoría de ellos en formato CD, esto supuso una caída del 18,7% respecto al año anterior. Fue gracias a los 433.000 vinilos vendidos de este año, frente a los 362.000 del anterior (un incremento del 19,6%) que el mercado físico aguante. Un comportamiento gratificante de un soporte tradicional que curiosamente no parece un hecho aislado: en Estados Unidos la venta de vinilos supone más ingresos que el streaming gratuito. En el caso del Reino Unido, la aparición de tiendas especializadas en este formato y el interés que despierta en los menores de 25 años ha permitido que los beneficios por su venta superen a las descargas digitales. Además, el vinilo vuelve a ser un soporte elegido por las discográficas para los grandes lanzamientos.