Universal Music refuerza su solicitud para desestimar la demanda contra Limp Bizkit

El pasado 20 de diciembre de 2024, Universal Music Group (UMG) presentó una respuesta formal para desestimar una demanda de $200 millones interpuesta por la banda de rock Limp Bizkit y su sello Flawless Records. La demanda, presentada en octubre de 2024, acusa a UMG de retener regalías no pagadas, incumplimiento de contrato y fraude, además de buscar la devolución de derechos de autor de varios artistas vinculados al sello.
La respuesta de UMG, presentada en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Central de California, argumenta que las acusaciones de la banda carecen de fundamento legal. La discográfica sostiene que Limp Bizkit no ha demostrado un incumplimiento total del contrato, requisito necesario según las leyes de California y Nueva York para rescindir un acuerdo de regalías. UMG afirma que realizó pagos por adelantado significativos a la banda antes de agosto de 2024, lo cual contradiría las alegaciones de incumplimiento.
En cuanto a las acusaciones de fraude, UMG asegura que Limp Bizkit no ha cumplido con los estándares legales para probar dicho delito. Según la demanda de la banda, se identificaron más de $1 millón en ganancias pendientes de pago, atribuidas por UMG a un error de software. Sin embargo, la compañía afirma que Limp Bizkit tiene acceso a un portal de regalías y derechos de auditoría para verificar los pagos, pero no ha identificado transacciones específicas que demuestren irregularidades.
Además, UMG argumenta que la relación entre ambas partes es puramente contractual, rechazando las acusaciones de deber fiduciario, y cuestiona la jurisdicción del caso. Según la compañía, una cláusula previa requiere que las disputas se resuelvan en Nueva York, no en California, donde se presentó la demanda.
El líder de Limp Bizkit, Fred Durst, exige justicia no solo para su banda, que ha vendido más de 45 millones de discos desde los años 90, sino también para otros artistas afectados bajo Flawless Records. Sin embargo, UMG califica las alegaciones como especulativas y basadas en sospechas más que en pruebas concretas.
El caso podría sentar un precedente crucial para disputas futuras entre artistas y discográficas sobre regalías y derechos contractuales. Por ahora, la industria musical sigue atenta a la decisión del tribunal sobre la moción de UMG, que podría determinar el curso de esta disputa multimillonaria.