DistroKid demandado en disputa por supuesta eliminación maliciosa de derechos de autor

El distribuidor DIY DistroKid ha sido demandado como parte de una demanda por presunto mal uso del sistema de notificación y eliminación establecido en la ley de derechos de autor de Estados Unidos.

Se acusa al distribuidor de incumplir su deber fiduciario hacia uno de sus clientes al no comunicar adecuadamente la información y no investigar los detalles de una notificación de eliminación que fue enviada a los servicios de streaming contra una de las canciones de ese cliente.

Los demandantes en el caso son un artista llamado Damien ‘Frosty The Doeman’ Wilson y su sello discográfico Doeman Music Group. Wilson y su sello utilizaron los servicios de DistroKid para distribuir su música en todos los servicios de streaming. Esto incluye una canción llamada ‘Scary Movie’, que Wilson creó en 2020. En la canción, colaboró con otro artista llamado Raquella George.

Según la demanda, Wilson pagó a George para que proporcionara «un breve fragmento de su voz» para incluirlo en la canción, lo que básicamente implicaba que ella grabara algunas palabras siguiendo sus instrucciones. Luego, la canción se lanzó, a través de DistroKid, con George acreditada como colaboradora.

Después del lanzamiento de ‘Scary Movie’, Wilson y George tuvieron problemas. En enero de 2021, George envió un mensaje a Wilson a través de Instagram exigiendo que se eliminara su nombre como artista de la canción. Supuestamente, ella dijo que, si no cumplía con su demanda, se vería obligada a emitir una notificación de eliminación contra la grabación, lo cual aparentemente hizo.

El sistema de notificación y eliminación forma parte del antiguo refugio seguro de derechos de autor bajo la ley de derechos de autor de Estados Unidos. Las plataformas digitales están obligadas a implementar sistemas a través de los cuales los propietarios de derechos de autor puedan eliminar cualquier contenido almacenado en esas plataformas que infrinja sus derechos.

Operar dicho sistema es un requisito si la plataforma desea evitar su propia responsabilidad por alojar material que infringe los derechos de autor.

Cuando el Congreso de Estados Unidos introdujo el refugio seguro de derechos de autor en la década de 1990, reconoció que esos sistemas de eliminación podrían ser abusados. Con ese fin, la ley establece que cualquier persona que emita una notificación de eliminación contra un contenido cuando sabe que no tiene un reclamo legítimo de derechos de autor puede ser demandada por daños y perjuicios.

También permite que la persona que subió el contenido contra el cual se emitió una notificación de eliminación presente una contra notificación. Y, la Oficina de Derechos de Autor de Estados Unidos explica en un documento sobre todo esto que «después de recibir una contra notificación que cumpla con los requisitos, el proveedor de servicios debe restablecer el acceso al material después de no menos de diez y no más de catorce días hábiles, a menos que el remitente de la notificación original informe al proveedor de servicios que ha presentado una demanda judicial contra el usuario».

En su demanda, Wilson insiste en que él es el propietario de los derechos de autor de ‘Scary Movie’, y agrega que George ni siquiera hizo ninguna reclamación en contrario. Por lo tanto, cualquier queja que pueda tener por estar conectada públicamente a la canción, no tenía derecho legal para emitir una notificación de eliminación bajo el sistema de refugio seguro de derechos de autor.

George misma también es nombrada como demandada en la demanda por su presunta tergiversación y abuso del sistema de eliminación. Sin embargo, Wilson también sostiene que DistroKid no hizo lo suficiente para proteger sus intereses una vez que se presentó la supuesta eliminación maliciosa.

Le enviaron un correo electrónico confirmando que habían sido notificados sobre la eliminación por parte de ciertos servicios de streaming que aparentemente habían eliminado la canción.

Sin embargo, no informaron a Wilson sobre los servicios específicos que habían recibido la notificación de eliminación ni proporcionaron ninguna información sobre dónde podría enviar contra notificaciones. En cambio, dijeron que tendría que ponerse en contacto con George para resolver la disputa.

Los servicios de streaming, obviamente, tienden a responder rápidamente a las notificaciones de eliminación porque no quieren ser considerados responsables de ninguna infracción de derechos de autor. Los distribuidores, por su parte, suelen aceptar las eliminaciones cuando ocurren y evitan que los artistas y sellos vuelvan a subir canciones que hayan sido objeto de notificaciones de eliminación previas.

Tampoco quieren ser acusados de infringir derechos de autor y no quieren molestar a ninguno de los servicios de streaming, porque eso puede afectar sus clasificaciones con los servicios, lo que a su vez puede afectar su capacidad para entregar contenido de manera rápida y eficiente.

Además, los distribuidores están bajo una presión cada vez mayor dentro de la industria musical para ayudar a detener la infracción y el fraude en las plataformas de streaming, y responder y cumplir con las eliminaciones son parte de lograr ese objetivo.

Mientras tanto, los distribuidores DIY como DistroKid, que distribuyen millones de canciones, generalmente a cambio de tarifas modestas cobradas al artista o sello discográfico, desean automatizar tanto como sea posible el proceso de distribución. No quieren pasar horas investigando y lidiando con disputas de derechos de autor y el intercambio de notificaciones de eliminación y contra notificaciones.

Sin embargo, esto afecta negativamente a los artistas y sellos discográficos independientes cuya música está siendo eliminada de los servicios de streaming debido a notificaciones de eliminación erróneas o maliciosas.

Si el emisor de la notificación de eliminación no cumple, entonces el artista o sello discográfico debe confiar en el sistema de contra notificaciones, especialmente debido a los costos y el tiempo asociados con emprender acciones legales contra quien emitió la notificación de eliminación.

Con todo esto en mente, Wilson argumenta que DistroKid incumplió su deber fiduciario y un convenio implícito de buena fe y trato justo al no proporcionarle la información y el apoyo que él y su sello discográfico necesitaban para defenderse contra la supuesta eliminación maliciosa.

Hasta qué punto se pueden extender estas responsabilidades a DistroKid en lo que es principalmente una disputa entre Wilson y George aún está por verse. Pero el abuso y mal uso de los sistemas de eliminación es definitivamente un problema, y uno que afecta principalmente a los artistas y sellos discográficos independientes.