La industria musical chilena, en «estado crítico», según su Observatorio Digital
Como ya venimos reportando desde hace semanas, la industria musical es uno de los sectores que más están sufriendo la crisis por la pandemia del coronavirus y una de las que más le costará recuperarse. En su caso, la industria musical de Chile tampoco iba a ser menos y ahora presenta el primer avance para reflejar el impacto del estallido social del pasado octubre y el COVID-19 en la industria. Esto ha evidenciado que la precariedad del sector proviene desde antes de ambos acontecimientos; el informe señala que el 66% de los músicos encuestados se encuentra en el rango de ingresos por debajo de los dos millones al año.
El Observatorio Digital de la Música Chilena (ODMC) fue el encargado del estudio. En la muestra participaron 1.548 músicos, 427 profesionales del campo de la música y 49 empresarios del sector. Para afinar el análisis, la muestra se segmentó en tres perfiles: músicos, profesional del área y representante de empresa o asociación.
La mayoría de los encuestados son músicos (76%). Le siguen los profesionales de la música (21%) y empresas (2%), y del total, el 81% son hombres. También se sabe que más de la mitad tiene una segunda actividad que le reporta un ingreso económico y que este mismo porcentaje ve probable tener que buscar una fuente de ingreso diferente.
Los más afectados, independientes y pymes
La crisis por la pandemia está perjudicando sobre todo a profesionales independientes, pymes y emprendedores, los cuales muchos viven de los espectáculos en vivo. Además, el 35% afirma que tendrá que despedir trabajadores, pero en vista de la poca certeza debido a las circunstancias, esta porcentaje podría ser mucho mayor.
Es importante recalcar que el 89% de los encuestados se declara independiente, una cifra problemática en momentos de crisis debido a su baja protección social y legal.
Cristóbal Dañobeitía, presidente de la ODMC, ha asegurado lo siguiente: «Ya es posible apreciar las condiciones débiles de la industria. Esto, sumado a una evidente precariedad en la condiciones de trabajo e ingresos base de los diferentes actores y una potencial recesión económica mundial, es posible considerar a la industria de la música en un estado crítico para la sustentabilidad de su ecosistema en el corto y mediano plazo».
