«Lemonade» de Beyoncé vuelve a generar el debate sobre las exclusivas en el streaming
El nuevo disco de Beyoncé, «Lemonade», que fue publicado el pasado sábado, ha puesto de nuevo en el centro del debate de la industria de la música las exclusividades a largo plazo en los servicios de streaming. El nuevo álbum de Beyoncé se encuentra disponible a nivel digital en las diferentes plataformas de descarga, siendo en iTunes el nº1 en múltiples países, mientras que en streaming sólo se encuentra disponible en la plataforma Tidal, del que el marido de Beyoncé es dueño.
Según Tidal, la exclusiva de «Lemonade» es perpetua, por lo que NUNCA estará disponible en ningún otro servicio de streaming – En este sentido esperemos que esta vez la compañía cumpla y no se haga un Kannye West, que prometió que su nuevo disco «The Life Of Pablo» nunca estaría en ningún otro servicio de streaming pero al mes de lanzarse ya estaba en las demás plataformas de streaming, por lo que en consecuencia les cayó una demanda colectiva contra el artista y la compañía. – por lo que los fans de Beyonce o bien se compran la descarga (un formato que está cayendo año a año) o bien se hacen suscriptores de Tidal.
¿Resultados de esta estrategia? Para la artista, el álbum ya se ha situado como número 1 en iTunes en múltiples países. Ahora bien, como sólo está disponible en streaming en la plataforma Tidal, tras 48 horas del lanzamiento el disco ya se había situado en las plataformas The Pirate Bay y Kick Ass Torrents en el número 1 de los contenidos más pirateados en ambas plataformas (Tal como nos muestra MBW).
Por el otro lado, Tidal escaló 148 posiciones en el ránking de aplicaciones gratuitas en iOS más descargadas en Estados Unidos, situándose en la posición 10 según el monitoreo de la empresa App Annie. Situándose el 25 de Abril por encima de Pandora y Spotify en ese mismo ránking. Es importante mencionar que Tidal también es la única plataforma que dispone del catálogo completo de Prince, recientemente fallecido, por lo que el empuje a las descargas de la aplicación fue doble.
Quien gana más, y si son buenas o malas, las exclusivas es un debate con opiniones encontradas en la propia industria, pero en todo este debate se olvida la pieza más importante, el fan, que parece estar relegado en la posición de víctima en este batalla por el negocio del streaming.