Promusicae edita el Libro Blanco de la Música en España 2013

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PRomusicae IDecLa música representa en España el 0,49 % del PIB de la economía 

La música como expresión artística y creativa, ya sea a través de su expresiones grabadas o sobre un escenario, tiene un peso específico del 0,49 por ciento del PIB de la economía española. En concreto, el impacto económico de la industria de la música en España ascendió a lo largo de 2012 a más de 5.058 millones de euros, si sumamos tanto las actividades directas como las inducidas. Este es uno de los datos más significativos que ofrece el Libro blanco de la música en España 2013, un exhaustivo diagnóstico numérico de la realidad musical en nuestro país  elaborado por IDEC-Universitat Pompeu Fabra, que Promusicae ha decidido publicar por segunda vez, teniendo en cuenta que el anterior informe de esta naturaleza se remontaba al año 2005. El volumen revela que los formatos digitales suponen ya en torno al 46% del negocio fonográfico, pero aún no es suficiente como para frenar la caída del sector. 

El Libro blanco de la música auspiciado por Promusicae (la entidad que engloba a la mayor parte de los productores de música en España) cifra el impacto directo de la actividad musical en 907 millones de euros, mientras que el inducido asciende a 4.151 millones de euros. Estas magnitudes implican, en el más conservador de los cálculos, que la música roza el medio punto porcentual en el Producto Interior Bruto (PIB) español.

Por impacto directo, los autores del informe contabilizan la música en directo (525 millones de euros, un 58 por ciento del total), la música grabada (163 millones, un 18 por ciento) y la edición musical, un concepto que se refiere fundamentalmente a los derechos de autor (219 millones, el 24 por ciento). El impacto inducido, más difícil de traducir a cifras en términos macroeconómicos, abarca desde los proveedores de Internet de banda ancha a las radios y televisiones, las salas de baile y discotecas, la producción publicitaria, la telefonía móvil y hasta el turismo musical.

El Libro Blanco de la Música 2013 - Promusicae Impacto Directo

En 2003 los españoles gastaron 493,8 millones de euros en fonogramas (por entonces en formato físico en su práctica totalidad), una cifra que, pese a la irrupción de modelos digitales de negocio, se contrajo en 2012 hasta los 141,1 millones de euros. En el caso concreto del CD, se vendieron 11,4 millones de ejemplares en 2012 frente a los más de 52 millones de unidades que se contabilizaban una década antes. Y ello, a pesar de que el precio medio de cada CD vendido en las tiendas españolas no ha dejado de descender: 9,18 euros en 2004, 7,93 en 2008 y 7,41 euros en 2012. Lo que demuestra que las personas consumen hoy muchísima música, pero no lo hacen en formato físico. En concreto, los españoles se gastaron en música grabada en 2012 un total de 141 millones de euros, una cifra inferior en un 77,5 por ciento a la que acreditaba el sector al comienzo del nuevo siglo.

Paralelamente, el auge del mercado digital constituye el principal motivo de esperanza para el sector, pero su crecimiento –lastrado por la piratería de archivos en Internet– es inferior a los países de nuestro entorno occidental. El negocio digital representó el 34 por ciento del total en el mercado español de 2012, si bien los datos ya conocidos del año en curso hacen pensar que en 2013 el mercado digital representará parámetros cercanos al 46%.

Dentro de lo digital, los datos más alentadores provienen de la cada vez mayor aceptación del streaming entre los consumidores españoles. Las suscripciones mensuales a servicios como Spotify, Deezer, Xbox o Napster representan ya un 38% del negocio digital, por encima del 30% de las descargas legales de álbumes, canciones y vídeos (a través de iTunes, por ejemplo). Además, el streaming financiado por publicidad (las versiones gratuitas de Spotify, YouTube y similares) supone un 24% del total de este negocio digital. Por último los productos para móviles, como los ringtones, que representan en un modesto 5%.

El Libro Blanco de la Música 2013 - Promusicae Música Digital

El Libro blanco resalta, por lo demás, el inmenso impacto que representa la música en las vidas de millones de personas. Siete de las diez cuentas más seguidas en Twitter, nueve de los diez perfiles predilectos de Facebook y nueve de cada diez vídeos que se ven a través de YouTube corresponden a artistas musicales. Y en el caso español, además, la música nacional conserva una importante cuota de mercado frente a la foránea. En concreto, el 66% de los nombres que han ocupado el Top 50 de los álbumes más vendidos entre 2004 y 2012 son españoles o latinoamericanos. En cambio, en las listas de canciones, el 62% corresponden a solistas o grupos internacionales.

La detallada radiografía de Promusicae (208 páginas) también hace escala en el marco político que ha conocido el sector a lo largo de estos últimos ocho años, desde el primer Libro blanco de 2005. Los autores subrayan que solo el 6% de las ayudas aportadas por el Ministerio de Cultura en sus políticas de fomento se han dedicado al sector de la música. Y destacan tres circunstancias legislativas que no han hecho sino agudizar las dificultades: el incremento del IVA desde el 8 al 21 por ciento (septiembre de 2012), la práctica supresión del sistema de compensación equitativa por copia privada (30 de diciembre de 2011) y la “absoluta incapacidad de los distintos gobiernos para tomar medidas efectivas contra la piratería, primero física y luego digital”.

El Libro Blanco de la Música en España 2013 está disponible para su consulta gratuita en este enlace.

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