¿Qué es Suno y por qué debe importarnos?

Suno, una startup de inteligencia artificial generativa de música, está atrapando la atención de la industria. Su reciente ronda de financiación de $125 millones, la más grande jamás vista para una empresa de IA musical, marca un cambio significativo.

Esta ronda de financiación es no solo la inversión más cuantiosa en una startup de IA en el ámbito de la música, sino también una de las cuatro únicas rondas de inversión en startups de music tech por más de 100 millones desde 2018.

¿Qué es Suno?

Suno empodera a los usuarios para crear música a través de la IA generativa. Los usuarios proporcionan un prompt de texto o detalles básicos como letras y estilo, y Suno genera una canción completa. Similar a un «Midjourney» para la música, donde los usuarios pueden crear paisajes sonoros únicos basados en su imaginación. Este enfoque innovador ha atraído ya a más de 10 millones de usuarios en solo ocho meses.

Más allá de los aspectos orientados al usuario, la tecnología de Suno se basa en modelos de IA poderosos. Estos modelos están entrenados con enormes conjuntos de datos de música, lo que les permite identificar patrones y recrear estilos musicales. Sin embargo, los detalles específicos de estos datos de entrenamiento son motivo de controversia.

¿Qué significa Suno para la industria?

Suno representa una disrupción significativa en la creación musical, con posibles implicaciones en toda la industria. Tan solo la magnitud de la inversión recaudada genera una impresión de que algo grande está ocurriendo, considerando también que las inversiones más altas en music tech entre 2010 y 2018 fueron destinadas a compañías que hoy conforman el status quo en el consumo de música, como Spotify y SoundCloud. 

Crecimiento Rápido y Adopción de Usuarios: La base de usuarios de Suno está en auge, lo que indica un posible cambio en los hábitos de consumo musical. Se informa que algunos usuarios están cambiando de Spotify a Suno, lo que genera preocupación sobre el impacto en la música creada por humanos. Esta tendencia podría alterar los modelos de ingresos por streaming y forzar a las plataformas a adaptarse.

Poder Técnico: Los modelos de IA de Suno son demostrablemente avanzados, generando canciones completas impresionantes. Esta tecnología podría remodelar los flujos de trabajo de producción musical. Artistas independientes podrían utilizar IA para crear demos o incluso álbumes completos. Las sesiones de estudio, tradicionalmente costosas, podrían convertirse en cosa del pasado para algunos. La tecnología de Suno también podría democratizar la creación musical, permitiendo que personas con conocimientos musicales limitados se expresen a través de la canción.

El éxito de Suno destaca la dependencia de la industria musical en modelos tradicionales. La creación musical mediante IA abre puertas para nuevas formas de interacción con los fans. Los artistas podrían utilizar IA para crear música personalizada para sus fans o experiencias interactivas donde los fans pueden influir en el resultado musical. La expresión artística también podría redefinirse. La IA podría convertirse en un colaborador en el proceso creativo, ayudando a los artistas a explorar nuevos paisajes sonoros y a superar límites. Además, la creación musical mediante IA podría generar nuevas fuentes de ingresos, como la concesión de licencias de música generada por IA para comerciales o películas.

¿Cuál es la trampa?

A pesar del impresionante ascenso de Suno, una nube oscura se cierne sobre sus datos de entrenamiento. Críticos, incluyendo a Ed Newton-Rex de Fairly Trained, sospechan que Suno entrena sus modelos de IA con música con derechos de autor sin permiso. Esto plantea preocupaciones de infracción de derechos de autor.

Suno sigue siendo hermético sobre sus fuentes de datos de entrenamiento. Este secreto alimenta la sospecha y dificulta la confianza dentro de la industria. Sin transparencia, es difícil evaluar si Suno está infringiendo derechos de autor. Un análisis hecho por Newton-Rex sugiere que el output de Suno guarda notables semejanzas con obras con derechos de autor, lo que apunta a posibles violaciones de copyright.

En una entrevista para Rolling Stone, uno de los inversionista reveló que Suno no tiene acuerdos de licencia con las discográficas, y que había invertido en la compañía con absoluto conocimiento de que las discográficas y editoriales podrián demandarles (por infringir sus derechos).

Las empresas de IA generativa a menudo argumentan que entrenar sus modelos de IA con obras con derechos de autor entra dentro de la excepción de «uso justo«. Sin embargo, este es un tema legal complejo sin un precedente claro en el contexto de la generación musical mediante IA.

El Futuro: ¿Asociaciones o Demandas?

El curso de acción deseado por todos es que la compañía firme acuerdos de licencia con los titulares de derechos, creando un ecosistema mutuamente beneficioso. Este enfoque podría desbloquear nuevas fuentes de ingresos para la industria e incentivar una mayor innovación en la música de IA.

Sin embargo, de corroborarse que la compañía ha utilizado obras bajo licencia sin la adecuada autorización, como la investigación de Newton-Rex sugiere, estaría en puertas una mega demanda por parte de la industria.

La reciente inyeccción financiera recibida por la empresa les otorga ahora cierto poder para tomar decisiones dependiendo de cual escenario surja primero.

Pedir perdón o pedir permiso

¿Puede la industria contrarrestar la idea de que la innovación en la música generada por IA prospera al eludir los permisos y licencias? Esta narrativa sugiere que las empresas de música de IA necesitan la libertad para experimentar sin restricciones legales. Sin embargo, la industria necesita asegurar que la innovación ocurra dentro de un marco legal que proteja los derechos de los creadores.

Presionar por regulaciones claras sobre el uso de datos de entrenamiento, permiso y transparencia es crucial. Regulaciones claras proporcionarían una hoja de ruta tanto para las empresas de IA como para los titulares de derechos, fomentando la innovación mientras se protege la propiedad intelectual. Ambas partes necesitan cerrar la brecha.

Las empresas de música de IA como Suno deben demostrar su compromiso con las asociaciones con sellos discográficos y artistas a través de acciones concretas. Esto podría incluir divulgación de las fuentes de datos de entrenamiento. Esto no necesariamente significa revelar cada detalle, pero ofrecer un marco general o trabajar con los titulares de derechos para establecer prácticas aceptables. Asociarse con artistas para crear experiencias musicales únicas impulsadas por IA podría fomentar la confianza y mostrar los beneficios potenciales de la música de IA.

Por otro lado, los titulares de derechos necesitan redactar términos de licencia justos y viables, con tarifas de licencia justas que reflejen el valor del material con derechos de autor utilizado para el entrenamiento. Esto podría implicar un sistema escalonado basado en factores como la prominencia del artista o la complejidad de la música, pero también ofrecer una gama de opciones de licencia para satisfacer diferentes necesidades. Algunos artistas podrían preferir una tarifa única de licencia, mientras que otros podrían estar interesados en regalías continuas basadas en el éxito de la música generada por IA.

La ronda de financiación de Suno marca un momento decisivo en la música. Si bien Suno ofrece posibilidades emocionantes para la creación musical, los problemas legales deben abordarse. La colaboración y el compromiso con la equidad son clave para forjar un futuro donde la música de IA complemente, en lugar de amenazar, a la industria musical tradicional.