Rio Music Conference 2015: ¿Qué novedades hay en la música electrónica a nivel mundial?

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Desde 2009, la Rio Music Conference (RMC) es el principal escaparate de los proyectos y las tendencias de la industria de la música electrónica en el Hemisferio Sur. Se celebra anualmente coincidiendo con el Carnaval carioca y atrae a una amplia diversidad de conferenciantes, artistas, emprendedores y expertos del sector que se reúnen para analizar la marcha de un género musical que está viviendo un momento de expansión sin precedentes. ¿Qué ideas han protagonizado los debates durante la celebración del evento, del 4 al 6 de febrero, en Río de Janeiro?

Todos los ojos en Latinoamérica

Hace unos meses, el diario británico The Guardian concluía que el subcontinente americano es «la próxima frontera de la industria musical». Brasil es una buena muestra de ello. A medida que sube el poder adquisitivo, el consumo cultural aumenta. Los organizadores de la RMC han calculado que 28 millones de brasileños asistieron a eventos de música electrónica en 2014. Los grandes operadores globales de eventos musicales desembarcaron hace tiempo en el país con estrategias de expansión muy decididas. Gigantes como SFX (Rock in Rio, Tomorrowland, Life in Colour…), Live Nation (Creamfields, Lollapalooza…) y Ultra Music compiten en el mercado de los macro festivales y también han adquirido varias empresas brasileñas de evento, prueba del buen hacer local.

Mainstream vs. Underground

La música electrónica vive dividida en dos grandes familias que representan sonidos muy distintos y formas diferentes de entender el género. Por un lado está la industria comercial y, por otro, los defensores de la identidad contracultural de la electrónica, vinculados al legado histórico del House y el Tecno. El mundo dance vive desde años en una convulsión provocada por su repentino auge comercial.  En ese fenómeno ha jugado un papel esencial la explosión de la cultura dance en Estados Unidos. Allí a los sonidos electrónicos más comerciales se los ha bautizado como EDM (acrónimo de Electronic Dance Music) y están representando una revolución social, de relaciones y modelos de consumo. Buena parte del debate profesional y cultural sobre la música electrónica está condicionada por esta polarización.

Ibiza vs. Las Vegas

Hoy día, existen dos grandes centros mundiales de la música electrónica. Ibiza, aunque también se ha convertido en un enorme negocio, simboliza su tradicional esencia culta y libre, y es el punto de encuentro de las corrientes europeas del género. Por contra, Las Vegas es un nuevo y ambicioso jugador sobre el escenario, un gran parque de atracciones hecho a base de luces de neón y dólares que está robando a Europa a sus mejores DJs a golpe de talonario. Dicen que han llegado a pagar 700.000 dólares a un DJ por una actuación. Preocupa el efecto alcista que esta escalada desata en los cachés artísticos en todo el mundo, en la medida en que compromete la viabilidad de cientos de clubes y festivales.

El agujero de los derechos de autor

La Association for Electronic Music (AFEM) ha estado en Río haciendo campaña a favor del pago de los royalties. Bajo el eslogan Get played, get paid, denuncian que cada año 130 millones de euros en derechos de autor se quedan sin llegar a los autores. Parte del problema tiene ver con la piratería, pero también con que compositores y productores no se registran en las sociedades de gestión. El efecto es que las SGAEs de cada país no tienen a quién abonar el dinero que recaudan por reproducciones musicales en clubes, festivales y radios. Este hecho ilustra la naturaleza informal de un sector que debe avanzar hacia la profesionalización. De otro modo, dejará de ser sostenible la actividad de autores y sellos discográficos, auténticos motores del género.

Ibaie Cerejo RMC 2015
Nuestro colaborador Ibai Cereijo – el segundo por la izquierda – en un panel del RMC 2015

Un espacio propicio para las marcas

La música electrónica ofrece un entorno en el que las marcas se encuentran cómodas y pueden rentabilizar sus inversiones en patrocinios, según ha constatado el experto brasileño Joao Anzolin en un estudio. Ahí están los casos de Avicii y H&M, o el de David Guetta y Renault. La unión entre marcas y eventos es un matrimonio necesario para dotar a los eventos de fuentes de financiación adicionales. Sin embargo, muchos artistas y promotores hallan a menudo difícil entablar acuerdos comerciales provechosos con empresas. Este desencuentro revela un estado de inmadurez en el sector y, de nuevo, su necesidad de avanzar hacia su profesionalización. A su vez, tal y como aseguró el representante de Inbev, el consorcio cervecero que agrupa a marcas como Budweiser y Corona, las marcas deben de ser catalizadoras de experiencias y aportar valor añadido a los eventos que patrocinan.

En busca del modelo de festival idóneo

En Río se discutió si son mejores los festivales especializados en un solo género musical o los que ofrecen una diversidad de estilos. Es decir, si tienen más posibilidades de triunfar formatos como Coachella y Lollapalooza, que ofrecen amplios abanicos de sonido, desde rock al indie y la electrónica, o propuestas más uniformes como el mexicano BPM, Ultra Music o Creamfields. En España, este dilema le resulta familiar a los amantes de la música cuando tengan que optar entre la variedad (Primavera Sound, Arenal Sound…) y la especialidad (Dreambeach, Monegros…). No hubo conclusiones claras, pero se aportó un asombroso dato sobre la salud de los festivales en Brasil: Tomorrowland celebra en mayo su primera edición en Sao Paulo y, antes incluso de anunciar a los artistas, agotó en sólo tres horas las 180.000 entradas a la venta.

Una década de Beatport y estreno en el streaming

La plataforma de descargas musicales Beatport -adquirida por el gigante SFX- cumple 10 años con un liderazgo indiscutible entre DJs y productores. Goza de aproximadamente un 80% de cuota de mercado y es la web más influyente y visitada en el mundo de la música electrónica, con 80 millones de usuarios diarios. A pesar de esta sólida posición, no ha querido quedarse atrás en la carrera por adaptarse a los nuevos formatos de consumo musical y en pocas semanas lanzará un servicio gratuito de streaming, financiado con publicidad. Otro actor más que añadir a un mercado muy concurrido, donde ya se pelean Spotify, Deezer, Rdio, Shazam…

Música y social media, de la mano

La música electrónica tiene una conexión muy estrecha con los social media. Sin el auge de Facebook y Twitter no se explica la explosión del género a nivel global. Ambos fenómenos comparten una identidad muy tecnológica y colaborativa. En la RMC se analizó a fondo cómo usan los social media artistas como Deadmau5, Steve Aoki, Diplo y Richie Hawtin, ejemplos todos ellos de éxito en la creación de contenidos de entretenimiento y en la interacción con los fans. También se subrayó el ascenso de Instagram en detrimento de Facebook entre los consumidores de música más jóvenes, y de Snapchat como serio rival de Twitter a medio plazo.

La RMC, una gran conferencia en ascenso

Año tras año, la Rio Music Conference progresa en número de invitados, asistentes e influencia global. Desde su estreno hace 7 años, promueve la colaboración y la búsqueda sinergias entre distintos actores de la industria electrónica de Brasil. La edición central de Río es la culminación de 5 congresos regionales de menor tamaño repartidos por todo el país. Además, la RMC sigue el modelo del exitoso Amsterdam Dance Event (ADE), posiblemente el encuentro de música electrónica líder del mundo. En un intento de dar visibilidad a la conferencia en la ciudad, los clubes locales programan durante esa semana eventos especiales. Todo se corona con un gran festival, en el que este año los cabezas de cartel han sido Tiesto, Afrojack, Alesso, Showtek y Dimitri Vegas & Like Mike.

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