Concierto piloto de Love of Lesbian en Barcelona demuestra viabilidad de eventos

image

En una noticia que es un buen augurio para el sector de los eventos de mediana escala en todo el mundo, se ha descubierto que no hubo signos de aumento de infecciones por Covid-19 luego del concierto-prueba piloto de Love of Lesbian en el Palau Sant Jordi de Barcelona (cap. 17.000) el pasado 27 de Marzo, al cual asistieron 5,000 fanáticos sin requisito de distanciamiento social.

El evento, que fue organizado por la organización catalana Festivals per la Cultura Segura, se aseguró de que todos los asistentes fuesen provistos de, y obligados a usar, una mascarilla FFP2. Otras medidas de mitigación de Covid-19 incluyeron una mejor ventilación en el lugar y la multitud se dividió en tres áreas, pero pudo moverse sin restricciones.

El evento se llevó a cabo en las mismas condiciones que un piloto anterior en el teatro Sala Apolo de la ciudad el pasado 12 de diciembre, lo que provocó que ninguno de los 463 asistentes se contagiara de coronavirus.

Los investigadores constataron que en los 14 días posteriores al evento en Sant Jordi solo seis asistentes dieron positivo, lo que supone una incidencia acumulada de 130,7 casos por cada 100.000, mientras que la media en Barcelona durante el mismo período y entre los mismos grupos de edad ha sido de 259,5 casos por 100.000 habitantes. Los organizadores dijeron que ninguna de las personas infectadas requirió hospitalización y que cuatro de ellos dijeron que creían que el origen de su infección fue algún otro lugar y no el concierto.

Las autoridades sanitarias dieron un permiso especial para permitir la entrada de hasta 5.000 personas al espectáculo del grupo de rock español Love of Lesbian. Los compradores de boletos se sometieron a una prueba de antígeno el mismo día. Si era negativo, se les permitió ingresar al recinto, que no tenía reglas de distanciamiento social, pero sí requería el uso de máscaras faciales de alta calidad.

Marcando el primer concierto en el Palau desde el 29 de febrero de 2020, el espectáculo fue una colaboración sin precedentes entre los mayores promotores de conciertos de Barcelona, ​​incluidos Primavera Sound, Sonar, Cruïlla, Vida Festival, Canet Rock y The Project, además de BSM, propiedad del Ayuntamiento de Barcelona, ​​dueños del recinto. Un equipo de científicos del Hospital Germans Trias y la Fundación Lucha contra la Sida trabajó en colaboración con los Departamentos de Salud, Seguridad y Cultura de la Generalitat de Catalunya.

Jordi Herreruela, Director del Festival Cruilla dijo: «Ya no hay dudas, con rigor en los protocolos y el tutelaje de los científicos y las administraciones, los grandes eventos no solo pueden ser seguros si no que además tienen un impacto positivo en la prevención del Virus«.