¿Cuál es la realidad del mercado de la música grabada en España?
Los datos publicados ayer por Promusicae sobre la venta de música grabada en España durante el 2014 son una excelente noticia para un sector, el discográfico, que venía durante todo el siglo XXI en caída. La noticia no solo es el aumento de los ingresos, es también el porcentaje en que ha crecido, un 21% respecto 2013, situando el sector discográfico a niveles de 2011.
Este crecimiento – uno de los mayores que se va a ver en el IFPI Report 2015 – ha sido destacado en todos los medios especializados internacionales, pues la realidad es que el mercado discográfico español era para muchos un mercado perdido, excesivamente difícil de monetizar, y ahora acaban de ver estupefactos un mercado que crece un 21%.
Pero cuidado pues este crecimiento – que repito es una excelente noticia – nos puede llevar a cierta confusión de la realidad del mercado. Este 21% de crecimiento, que supuso 149,9 millones de euros a lo largo de 2014, se ha visto sustentado por un lógico crecimiento digital (+22,7%) y por un crecimiento físico del 20%!
Aquí radica mi escepticismo a este crecimiento tan alto del mercado español, el físico aumentó un 20% algo que va en contra de toda tendencia. Es cierto que los Lp aumentaron un 85%, algo normal en la tendencia mundial del crecimiento del vinilo, pero realmente este incremento físico viene dado por el CD, que aumentó un 22%!
Tal como indicaban desde Promusicae, la coincidencia esta temporada de nuevos álbumes a cargo de artistas como Pablo Alborán, Bisbal, El Barrio y Fito & Fitipaldis, ACDC, entre otros artistas claramente con un perfil más físico que digital, han provocado ese aumento del formato CD.
Pero como decía, si nos vamos a la tendencia general de consumo occidental del formato físico (excepto casos como el de Alemania donde el mercado físico supone el 75% de los ingresos), lo lógico es que el formato físico hubiera marcado en el mejor de los casos un crecimiento del 0% o bien, hubiera entrado dentro de la lógica una caída entre el 5% y el 10%. Ante estos escenarios España hubiera tenido un crecimiento en el 2014 entre el 3,5% y el 10%, una situación más acorde a los resultados de otros países similares a España y de igual forma positiva.
En este sentido, me reafirmo en que España es un claro país de consumo de streaming, viendo los datos del digital del 2014 no cabe dudas, las descargas cayeron un 2% mientras que el streaming (publicidad + suscripciones) aumentaron un 36,3%.
Lo comenté hace unos meses en un artículo anterior, España es un potencial mercado del streaming, simplemente hay que hacer unos pequeños ajustes para que realmente despegue como fuente principal de ingresos de la música grabada, y es que a día de hoy el consumo de streaming en España es mayormente free+publicidad. Una situación que no es mala pues está ayudando mucho a reducir los índices de piratería, ya que la forma de consumo gratis más fácil para los usuarios a día de hoy es YouTube.
Es difícil de prever una tendencia para España, pero el digital açun tiene que hacer un click para despegar pues sólo representa el 42% de los ingresos, entonces teniendo en cuenta que el digital seguirá creciendo en España, gracias al streaming, sumado a una posible ligera mejora en la economía española, la tendencia es que veamos en 2015 un nuevo crecimiento, aunque no tan elevado (quizás entre el 3 y el 10%) pues las ventas físicas deberían volver a su tendencia de estancamiento o reducción.
