Los Premios Grammy 2014, un cambio en las reglas del juego
[ACTUALIZACIÓN 28/01] : Según fuentes de A2IM los músicos independientes se llevaron a casa el 50% de los Grammys
El día de ayer el Staple Center de Los Ángeles fue testigo de una noche emblemática en la edición 56 de los Premios Grammy, algo que marcó lo que puede ser concebido como la consagración de una nueva industria musical. Una gala en la que derrumbaron paradigmas. Grandes estrellas y leyendas estuvieron presentes en los premios, muchos subieron al escenario a recibir el preciado gramófono como fue el caso de Sir Paul McCartney junto a los miembros de Nirvana o personajes claves en lo ocurrido a nivel musical como es el caso de Pharrell, el gran productor del año, pero sobre todo quiero destacar los triunfos de Daft Punk, Mackelmore & Ryan Lewis y Lorde, ya que desde mi punto de vista, sus triunfos reflejan una nueva era del negocio de la música.
El dúo francés Daft Punk arrasó en cada una de las categorías llevándose a casa un total de 5 Grammy «Mejor Álbum de Electrónica» por Random Access Memories, Grabación del Año y Mejor Interpretación Pop para Dúo/Grupo por «Get Lucky», Mejor Ingeniería de un Álbum no Clásico, al igual el premio más importante de la noche, Mejor Álbum del Año también quedó en manos de los robots parisinos. Un hecho histórico, ya que por primera vez el premio al álbum del año se le otorgaba a un acto de música electrónica, aunque si bien es un disco muy orgánico, el elemento electrónico es la carta de presentación del dúo, además de ser los primeros franceses en recibir dicho premio. En este sentido lo ocurrido ayer refleja la importancia que toma cada día más la música electrónica, y su penetración en la industria.
Definitivamente un año para el recuerdo el de Daft Punk, ya que en una época en la que el directo ha retomado la importancia que alguna vez tuvo, el grupo del año logró consagrar su estrellato, desde los estudios de grabación y desde el laboratorio de marketing de su sello y no desde los escenarios.
Las reglas del juego han cambiado, eso es lo Macklemore & Ryan Lewis dejaron muy claro en la entrega de los premios. El dúo de raperos independientes se consagró como Mejor Artista Nuevo, pero aún más importante fue su consagración en la categoría Rap en la que dejaron sentado en tres ocasiones a leyendas como Jay-Z, Eminem o Kanye West, llevándose así los premio a Mejor Álbum de Rap, Mejor Interpretación y Mejor Canción. Repito un dúo independiente de raperos blancos, con letras pro-gay, fueron los grandes ganadores de la noche, algo que nos demuestra cómo las reglas del juego han cambiado. Hoy en día gracias al Internet y los servicios streaming, la buena música y los buenos artistas independientes tienen la oportunidad de abrirse camino al Olimpo de las grandes estrellas de multinacionales. The Heist fue un disco que tomo casi 4 años en formarse, ya que se fue elaborando por partes, las cuales se fueron sumando a lo que hoy conocemos como el álbum, en la misma forma en que iban sumando orgánicamente fans que los llevaron a tener uno de los grandes éxitos del año y en tener el disco más sonado en plataformas como Spotify.
Continuando en la línea de artistas que con su triunfo demostraron el cambio que está teniendo la industria, se encuentra Lorde, la joven que a los 16 años de edad encontró la fama gracias a una su canción, «Royals«. La cual fue inicialmente distribuida gratuitamente captando una gran cantidad de fans a través de Souncloud y que posteriormente gracias al impulso de Spotify se convertiría en uno de los hits del año. Consiguiendo ser reconocida como la Canción del Año y como Mejor Interpretación Solista Pop. A pesar de contar con el apoyo de Universal Music, con Lorde vemos cómo las nuevas plataformas de distribución pueden ser un agente clave en la creación de las nuevas estrellas de la música.
Por último, sumar que la noche de ayer demostró cómo los premios de la Academia responde a otros aspectos que van más allá del comportamiento de consumo reflejado en plataformas como Spotify o Shazam los cuales son agentes importantes que pueden servir de indicativos e impulso, más en sí no son agentes determinantes en los ganadores finales de los premios más importantes de la música. Aún quedan muchos aspecto que van más allá de meras cifras de consumo. Es por eso que de los 7 premios que predijo Shazam, solamente acertó 2, gracias a los triunfos de Mackelmore & Ryan Lewis. Mientras que Spotify fue mucho más certero, consiguiendo 3 aciertos en 5 predicciones, gracias los triunfos de Royals, Get Lucky y nuevamente de Mackelmore & Ryan Lewis.