Mujeres y productores no binarios están «enormemente subrepresentados» en las principales canciones de 2022.
El informe inaugural de Fix the Mix encontró que las mujeres y las personas no binarias reclamaron menos del 5% de los créditos técnicos de las canciones más reproducidas en 2022, representando un total de 187 de los 3.781 créditos en las 757 canciones analizadas.
Desarrollado por la organización sin fines de lucro We Are Moving the Needle y la base de datos de créditos musicales Jaxsta, en colaboración con la Universidad de Howard y la Universidad Estatal de Middle Tennessee, los hallazgos forman parte de lo que los investigadores llaman «el primer estudio importante de la representación de género en todo el personal acreditado de producción e ingeniería según su papel».
En total, se analizaron 1.128 canciones de 2022, incluyendo las 757 canciones más reproducidas, 30 álbumes ganadores del Grammy, las 50 mejores canciones de la lista de reproducción del club de miles de millones de Spotify, que lista todas las canciones con más de 1.000 millones de reproducciones, y las 50 mejores canciones de la lista de discos certificados por diamante de la RIAA.
El estudio examinó los roles clave de primera línea, incluidos productores, ingenieros de sonido, ingenieros de mezcla e ingenieros de masterización, así como roles adicionales de producción y grabación, como programadores, productores vocales, editores y asistentes.
Una encuesta de las 10 canciones más reproducidas de 2022 en cinco de los principales servicios de streaming (Spotify, Apple Music, Amazon Music, YouTube y TikTok) reveló una «brecha de género significativa». De las 36 canciones únicas en estas plataformas, había 256 productores e ingenieros de sonido acreditados, de los cuales solo 16 eran mujeres y personas no binarias. «Cuff It» de Beyoncé reclamó cinco de esos créditos.
El informe también encontró que las mujeres y las personas no binarias están más concentradas en roles de asistentes que en roles técnicos clave, lo que sugiere que existe un «techo de cristal» que puede estar «impidiendo que esta población tenga una trayectoria ascendente».
La coautora y fundadora de We Are Moving the Needle, Emily Lazar, ingeniera de masterización y la primera mujer en ganar el premio Grammy a la mejor ingeniería de álbum por Colors de Beck en 2019, dijo: «Este estudio confirma lo que he sabido después de pasar décadas detrás del tablero en el estudio de grabación: las mujeres no están recibiendo las mismas oportunidades que los hombres en los roles de producción e ingeniería».
Añadió: «Esperamos que este informe proporcione a los que toman las decisiones la motivación y las herramientas que necesitan para hacer un cambio real en sus prácticas de contratación para que podamos lograr la paridad de género en los roles de producción, ingeniería y masterización».
Mientras tanto, la categoría de música electrónica ostentó la mayor representación de mujeres y personas no binarias en roles de productor, representando el 17.6% de todos los créditos de productor en las 50 mejores canciones de 2022; la canción con más mujeres y personas no binarias acreditadas en roles técnicos en esta categoría es Silence de Giolì & Assia Folk. La música folk y americana le siguió de cerca con el 16.4% de sus créditos de productor atribuidos a estos grupos de género.
El informe también analizó los premios Grammy de este año. De todos los álbumes ganadores en las 28 categorías «mejor en género», 17 álbumes no acreditaron a mujeres o personas no binarias como productores o ingenieros. Solo 19 de 249 créditos en estos ganadores fueron para mujeres y personas no binarias.
Los resultados están en desacuerdo con el aumento de mujeres y profesionales no binarios trabajando en producción en los últimos años. Como resultado, el estudio concluyó que las mujeres y personas no binarias no están siendo contratadas después de obtener títulos de producción de audio o completar las calificaciones necesarias para roles acreditados. Se afirma que «deben hacerse tremendos avances para lograr una representación de género significativamente mayor en la industria de la grabación».
Para reducir la brecha de género y empoderar a las mujeres y personas no binarias que trabajan en música, el informe sugiere acreditar con precisión a todos los contribuyentes técnicos, diversificar las prácticas de contratación, educar a la industria y exigir transparencia en los datos.
También insta a las personas a apoyar a los grupos de defensa que trabajan hacia una representación igualitaria en la industria de la música a través de la asignación de recursos, la educación y la creación de redes.
«Esto no es simplemente una opción, sino un imperativo», dice el informe. «Debemos tomar medidas audaces y decisivas para garantizar que aquellos que históricamente han sido marginados o subrepresentados tengan igualdad de oportunidades de empleo y un campo de juego nivelado. Apoyar y expandir estas iniciativas ayudará a la industria de la música a lograr el progreso que dice perseguir».
