Queen está finalmente cerca de vender su catálogo

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Después de meses de especulaciones y negociaciones discretas, parece que el legendario grupo Queen está cerca de cerrar un acuerdo histórico para vender su preciado catálogo musical. Según fuentes cercanas a la banda, Queen podría estar en conversaciones exclusivas con un comprador no revelado.

Los activos musicales que se incluyen en esta posible venta son vastos y lucrativos. Además de las grabaciones originales de la banda, el catálogo abarca las composiciones y flujos de ingresos adicionales, como los generados por la exitosa película «Bohemian Rhapsody» de 2018, así como por la venta de merchandise y otras oportunidades de licencia. Este acuerdo también podría involucrar regalías de las grabaciones de Queen en América del Norte, vendidas previamente a Hollywood Records, propiedad de Disney.

Desde que Queen comenzó a ofrecer su catálogo en mayo de 2023, ha habido una gran cantidad de informes y especulaciones sobre posibles compradores, así como sobre el precio que la banda está buscando. Se ha sugerido que Queen está buscando un asombroso pago de $1.2 mil millones, una cifra que ha sido objeto de intensas negociaciones y análisis por parte de varios compradores potenciales.

Se rumora que entre los compradores interesados se encuentran gigantes de la industria musical como Universal Music Group y Disney, aunque las fuentes indican que el catálogo de Queen se ofreció solo a algunos compradores selectos. Esto se debe a la voluntad de los miembros de la banda de garantizar que su legado musical esté en buenas manos, así como al precio exigido, que ha llevado a algunos posibles compradores a asociarse con instituciones financieras para realizar una oferta.

Cada miembro de la banda, Brian May, Roger Taylor, John Deacon y el patrimonio del fallecido Freddie Mercury, tiene sus propios representantes legales involucrados en las negociaciones, lo que subraya la seriedad y la complejidad de este proceso de venta.

El catálogo de Queen es un tesoro de la música popular, con icónicas canciones como «Bohemian Rhapsody», «Killer Queen», «Another One Bites the Dust» y «We Will Rock You», entre muchas otras. Este legado ha demostrado ser increíblemente rentable a lo largo de los años, especialmente desde el lanzamiento de la película biográfica de la banda en 2018.

Los activos musicales generalmente se negocian en base a modelos financieros construidos en torno al rendimiento promedio del catálogo durante los tres años más recientes. Se negocian en lo que se conoce como participación neta del sello: ganancia bruta después del costo de los bienes pero antes de los costos de marketing. O, en el caso de las composiciones, participación neta de la editorial: ganancia bruta después de pagar regalías.

Sin embargo, la película Bohemian Rhapsody revitalizó el interés en la música de Queen, impulsando las ventas de álbumes y las reproducciones en streaming a niveles récord. Desde su estreno, la actividad del catálogo de Queen ha experimentado un crecimiento significativo, lo que ha contribuido a aumentar su valor en el mercado, alterando los promedios comúnmente utilizados para fijar precios en estos acuerdos.

La evaluación del catálogo de Queen no es tarea fácil, especialmente dada la influencia única de la película en sus cifras de ventas y reproducciones. Los posibles compradores están analizando cuidadosamente la actividad del catálogo en los últimos años para determinar su verdadero valor y potencial a largo plazo.

Después de descartar 2018 y 2019 como una anomalía, el equipo de Queen probablemente argumenta que la película ha llevado a Queen a una audiencia más amplia y que el éxito se mantendrá. Sin embargo, los posibles compradores que consideran la adquisición de Queen podrían estar preocupados de que parte de esa actividad aún pueda deberse al resplandor posterior a la película. Y si es así, ¿cuánta disminución aún podría ocurrir antes de que las ventas y la actividad del streaming se estabilicen y se vuelvan predecibles?»

Las finanzas de Queen, aunque impresionantes, también presentan desafíos en términos de evaluación. Si bien los informes financieros muestran ganancias sólidas, es probable que haya ingresos adicionales que no se reflejen en estos números, lo que complica aún más el proceso de valoración.