Sector del directo en Bélgica se prepara para la bancarrota

image

Bélgica se enfrenta a insolvencias generalizadas este otoño, a menos que el gobierno intervenga para apuntalar el sector de eventos, advirtió la industria del directo del país.

Además de la extensión de las medidas de ayuda al desempleo existentes, se necesita un salvavidas financiero por valor de al menos «varias decenas de millones» de euros, específicamente para el negocio del entretenimiento en vivo, para evitar desastres para los festivales, promotores, agentes y salas belgas, la mayoría de los cuales han aceptado que los eventos en vivo no regresarán en su totalidad hasta 2021, según un nuevo organismo de la industria, Live Sector Consultation.

En una carta abierta, la organización Live Sector Overleg, que comprende festivales, bookers, managers de artistas, clubes de música y centros culturales, advierte que si bien ahora es posible abrir lugares de manera segura, abrir de manera rentable no lo es, especialmente a la luz de la reciente decisión de recortar los límites de capacidad a 100 para espectáculos en interiores después de un aumento en las infecciones por Covid-19

Tanto a nivel nacional como local, la política está empujando a nuestro sector más hacia el pantano”, dice la carta.“Hagamos frente a los hechos: la recuperación real no será hasta 2021. La normativa actual (incluidas las medidas relativas al paro temporal, las ayudas puente, etc.) debe ampliarse, pero no será suficiente por sí sola. Este sector necesita un salvavidas financiero adicional de al menos varias decenas de millones, y para eso miramos directamente a los diversos gobiernos de nuestro país”.

Al preguntar qué otra industria «puede decir que ha perdido el 95% de una industria de mil millones de euros», Overleg destaca la contribución de la música en vivo a la economía belga, advirtiendo de un escenario en el que «no habrá más conciertos en el Antwerp Sportpaleis» y “no más escenarios de construcción Stageco para Rammstein y los Rolling Stones. Cada vez más parece que nuestro gobierno quiere tirar nuestro sector, que representa el 5% del producto nacional bruto a la basura”, agrega.

Según PwC, Bélgica fue el duodécimo mercado de música en vivo más grande de Europa en 2019, con un valor de 273 millones de dólares en ventas de entradas.

La carta concluye exigiendo a las autoridades que «dejen de andarse por las ramas» y tomen medidas decisivas para salvaguardar el bienestar del antes próspero sector de la vida en Bélgica.

¿Cómo nos aseguramos de que uno de los sectores más saludables y exitosos pueda sobrevivir, y que garanticemos la retención, cuando sea posible, de más de 80.000 puestos de trabajo? ¿Cómo nos aseguramos de que nuestros conocimientos técnicos reconocidos internacionalmente permanezcan en el sector y no veamos una fuga de cerebros masiva? ¿Cómo nos aseguramos de que podamos seguir poniendo los mejores talentos artísticos en nuestros escenarios? ¿Cómo podemos evitar que nuestra felicidad nacional bruta disminuya durante muchos años? ¿Dónde está el plan de contingencia económica? Ya hemos hecho muchas propuestas. Es hora de concretar«.