Canadá impone a servicios de streaming un impuesto de 5% sobre ingresos

image

Los servicios de streaming han expresado su rechazo a una reciente regulación en Canadá que les exige a las principales plataformas de streaming pagar el 5% de sus ingresos a grupos que apoyan la creación de contenido canadiense. Esta medida, según los críticos, podría tener efectos negativos tanto para los artistas como para los consumidores de música en el país.

Graham Davies, presidente y director ejecutivo de la Asociación de Medios Digitales (DiMA), manifestó su preocupación en un comunicado emitido el 4 de junio. “Estamos profundamente preocupados por la decisión de hoy de imponer un impuesto discriminatorio a los servicios de streaming que ya están haciendo contribuciones significativas a los artistas y la cultura canadiense”, declaró Davies. La DiMA, que representa a gigantes del streaming como Amazon Music, Apple Music y Spotify, sostiene que esta nueva regulación actúa como un subsidio proteccionista para la radio, en detrimento de los servicios de streaming que han impulsado el crecimiento de la música en Canadá.

La Ley de Streaming en Línea de Canadá, promulgada en 2023, otorga a la Comisión de Radiodifusión y Telecomunicaciones de Canadá (CRTC) mayor poder para regular el contenido en línea. Una de las primeras acciones bajo esta ley fue la decisión del CRTC de que, a partir del 1 de septiembre de 2024, cualquier proveedor de servicios digitales con ingresos anuales superiores a CAD $25 millones deberá contribuir con el 5% de esos ingresos a programas de apoyo a creadores de contenido canadiense. Esta norma afecta a plataformas de video como Netflix y Disney+, así como a servicios de streaming de música.

Los fondos recaudados se destinarán a diversas organizaciones y programas, entre ellos la Fundación de Apoyo a Talento Canadiense en Grabaciones (FACTOR) y su equivalente francófono, Musicaction. También se beneficiarán el Fondo Starmaker de Canadá, que apoya a artistas emergentes, y el Fondo de Radio Comunitaria de Canadá, que asiste financieramente a estaciones de radio locales. Un porcentaje de los ingresos también se dirigirá a la Oficina de Música Indígena y a un nuevo fondo para apoyar la música indígena. Sorprendentemente, el 1.5% de los ingresos de los servicios de streaming musical se asignará a un fondo temporal para apoyar la producción de noticias locales por parte de estaciones de radio comerciales.

Spotify ha sido uno de los críticos más vocales de la nueva regulación. Según la compañía, los servicios de streaming ya pagan 8.5 veces más en regalías que la radio y son esenciales para el crecimiento de la música canadiense. Spotify, que genera miles de millones de dólares para la industria musical canadiense, sostiene que estas nuevas cargas financieras podrían obligar a reducir los apoyos existentes o aumentar los precios para los consumidores.

El grupo de defensa de los consumidores OpenMedia ha criticado las regulaciones, señalando que es probable que aumenten los precios para los consumidores. Matt Hatfield, director ejecutivo de OpenMedia, argumentó que para negocios de bajo margen como Spotify, el nuevo impuesto del 5% probablemente se trasladará a los suscriptores. Además, criticó que la mayor parte del dinero se destine a la radiodifusión tradicional en lugar de a los creadores digitales.